Durante la pasada semana, Ceuta sufrió una presión migratoria extraordinaria que ha colapsado los recursos que la Ciudad destina a los menores no acompañados que han llegado a las costas ceutíes a nado, que está casi a un 500% de su capacidad. Algo mejor se encuentra el CETI, que ya supera los 700 residentes.
Pese a los intentos de entrada masiva desde el pasado jueves, las autoridades españolas han afirmado la labor de control y disuasión de las autoridades marroquíes en el otro lado de la frontera, con el despliegue de efectivos de la Gendarmería y del Ejército en las playas de Castillejos para evitar los pases a nado y han desalojado las zonas próximas al perímetro fronterizo. Pero Marruecos ha dado un paso más en esa labor de disuasión y contención en los pases a nado
Según fuentes consultadas en Marruecos, durante la tarde de este martes han visitado Castillejos autoridades de seguridad procedentes de Rabat y poco después se divisaban en el horizonte cuatro buques de la Marina Real de Marruecos junto con tres embarcaciones de Protección Civil de Marruecos, reforzando la vigilancia por mar y que han sido visibles desde la playa del Tarajal.
