La presión migratoria en Ceuta ha alcanzado niveles críticos, lo que ha llevado a Younes Tazi, gobernador de la región de Tánger-Tetuán-Alhucemas, a desplazarse este lunes por la mañana a Castillejos, acompañado de altos responsables de seguridad, para evaluar la situación sobre el terreno.
Esta nueva ola migratoria ha coincidido con la aparición de niebla, dificultando las operaciones de vigilancia. En la mañana de este lunes, se han registrado alrededor de 250 nuevos intentos de cruce, evidenciados por la presencia de ropa abandonada en las playas de Castillejos. Esto subraya la magnitud de las operaciones de contención llevadas a cabo por las autoridades marroquíes, como destacó la delegada del Gobierno en Ceuta, Cristina Pérez, en una comparecencia ante los medios de comunicación. En los últimos días, se han observado picos de hasta 1.500 nadadores en una sola noche.
Sin embargo, la intensificación de la vigilancia en la frontera con Ceuta por parte de las autoridades marroquíes, reforzada por la visita del gobernador y de los agentes de seguridad, ha estado marcada por escenas de enfrentamientos entre menores que intentaban desesperadamente cruzar la frontera y las autoridades del país vecino, según informan medios marroquíes.
