La Asamblea se planta ante la idea “vergonzosa” e “ilegal” de Vox de expulsar a los menores migrantes

Los grupos políticos rechazan el discurso de los ultraderechistas, que insisten en pedir la repatriación directa de los niños migrantes no acompañados aunque, tal y como ha advertido Gaitán, “atenta contra los derechos humanos”

 

 Menores migrantes en el puerto
photo_camera Menores migrantes en el puerto

Vox no cesa en su empeño de buscar aliados por todo el país para que secunden su rechazo al reparto de los menores migrantes no acompañados recientemente acordado entre el Gobierno socialista de Sánchez y varios ejecutivos autonómicos liderados por el PP. Pero en Ceuta no los ha encontrado.

Aunque han vestido su propuesta como una manera exigir alternativas que "prioricen la seguridad ciudadana” y pedido “la implementación de un plan efectivo de repatriación de menores con sus padres a sus países de origen" en pos de su supuesto bienestar, la propuesta, que exigía la “inmediata expulsión” de los menores –“empezando por los más conflictivos”- no ha ‘colado’ entre la Asamblea, que ha rechazado de manera unilateral lo que ha considerado “una vergüenza” y “un asco”, además de una medida “temeraria”, “inviable” e “ilegal”.

Alberto Gaitán, consejero de Presidencia, ha calificado el discurso del grupo como “una muestra más de su falso patriotismo” llamada a generar “alarma social”. “Atenta contra los derechos humanos y del niño”, ha advertido sobre el tema, ya “cansino”.

“Son personas, son niños, ¿no lo ve?”, ha preguntado Sebastián Guerrero desde el PSOE, quien no se ha querido extender en dar respuesta a “la brutalidad hecha partido”. “La mayoría de esos ‘menas’ no tienen siete u ocho añitos, se hacen pasar por menores y no lo son”, ha tratado de defender Vox sin éxito.

“La suya es una ideología fascista y no sé cómo hemos llegado a tener tantos personajes como ustedes en política”, ha calificado Fatima Hamed, del MDyC, quien ha desmontado la argumentación de Juan Sergio Redondo e indicado que nunca ha llamado “menas” a los migrantes ucranianos porque “mide la inmigración por el color de la piel”.

Tirando de falacia ad hominem, el ultraderechista solo ha respondido que “a la señora Hamed no la escuchan en su casa y por eso viene al Pleno a darnos la chapa” y devuelto el calificativo aludiendo a una supuesta intervención “antisemita” y “junto a un talibán” protagonizada por la diputada: “la única fascista aquí es usted”.

Así, en su insistencia por hablar sobre una cuestión de “gravísima inseguridad”, que solo trae “problemas, precariedad, degradación y delincuencia” en los “barrios más humildes” y en aludir al “grave efecto llamada”, del que ha culpado al presidente, Juan Vivas, y al rey alauita Mohamed VI a la vez, Redondo se ha encontrado con una pared.

“Les aburren tantas alusiones legales, las leyes las usan para lo que quieren, prefieren recurrir al discurso facilón de 'vienen con machetes a por nosotros'; es más fácil manipular”, ha continuado Hamed, a quien no le ha temblado la voz de calificar a los ultraderechistas de “peligro” como “promotores de los delitos de odio” en el país.

Gaitán por su parte ha insistido en que la postura del PP exige una reforma estructural, aunque de momento la decisión tomada en la Conferencia Sectorial ha supuesto “un alivio para Ceuta” que requerirá de una futura medida “viable en el tiempo” que pasará por la reforma de la Ley de Extranjería.

Así pues, el Pleno se ha cerrado en banda ante un Redondo visiblemente soliviantado que, una vez más, se ha quedado solo.