Los trabajadores de Brigadas Verdes continúan adelante con su pretensión de paralizar el proceso de municipalización del servicio de limpieza viaria y recogida de residuos. El presidente del comité de empresa, Mustafa Mohamed, ha solicitado por escrito a la Secretaría General de la Ciudad la certificación de que la Administración local ha respondido con el silencio administrativo al recurso de reposición presentado el pasado 11 de abril contra un acuerdo de la Asamblea que daba vía libre al proceso de municipalización.
La tesis del comité de Brigadas Verdes, ya detallada en un escrito previo remitido al presidente de la Ciudad, Juan Vivas, es que ante la falta de respuesta al recurso es de aplicación lo que la legislación establece sobre silencio administrativo. Por tanto, sostiene el comité, transcurrido un mes sin respuesta al recurso ha de entenderse que el proceso abierto para que la Ciudad asuma la gestión de la limpieza queda legalmente suspendido.
Este movimiento de los trabajadores de Brigadas Verdes está vinculado a su reivindicación de ser integrados en la plantilla de Servilimpce, la futura empresa pública de la limpieza. El Gobierno municipal ha negado que esta subrogación sea legalmente posible, aunque sí ha aceptado negociar la posibilidad de que los trabajadores del servicio actualmente gestionado por la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos (FPAV) sean asimilados por otras sociedades municipales.
La demanda de que se paralice el proceso de municipalización ha cogido por sorpresa a los dirigentes de CCOO, sindicato mayoritario en el comité de Brigadas Verdes. CCOO considera que la paralización del procedimiento ocasionaría perjuicios evidentes a los trabajadores de Trace, anterior prestataria del servicio de limpieza, que podrían ver entorpecida su subrogación por la nueva empresa. Además, el sindicato considera que las negociaciones abiertas con el Gobierno municipal para incorporar a la plantilla de Brigadas Verdes a alguna empresa pública abren expectativas halagüeñas.
