La gestión de la limpieza de las playas en la Ciudad Autónoma ha vuelto a ser motivo de controversia. En esta ocasión, la Asociación de Vecinos de San Amaro ha emitido una dura crítica hacia el área de Fomento, Servicio Urbano y Medio Ambiente, dirigida por Alejandro Ramírez, señalando un abandono flagrante de su playa local. Según la asociación, la falta de limpieza y mantenimiento en la playa de San Amaro ha alcanzado un nivel intolerable, con la basura acumulándose desde hace más de una semana sin que nadie se haya presentado para retirarla.
La situación ha provocado un gran malestar entre los vecinos, que se sienten desatendidos y discriminados en comparación con otras playas de la ciudad que, según ellos, reciben un tratamiento preferente. La crítica más aguda se centra en la ausencia de maquinaria para adecentar un socavón que lleva días deteriorando la playa, evidenciando, según los vecinos, un patrón de “playas de primera y de segunda” que ha caracterizado la gestión de este servicio en San Amaro.
La situación se ha complicado aún más cuando empleados de TRACE revelaron que el pasado miércoles se les ordenó acudir a la playa de la Ribera para una “sesión fotográfica”, lo que describieron como una operación de "postureo". Según estos trabajadores, se les instruyó a colocarse en la playa para aparentar que se estaba llevando a cabo una limpieza activa, a pesar de que, en realidad, no se realizó ninguna labor de limpieza significativa. Esta acusación ha intensificado las críticas hacia la Consejería de Fomento, que presuntamente utilizó estas imágenes para presumir de un trabajo que, en palabras de los empleados, fue inexistente.
Fuentes sindicales respaldan las denuncias de los vecinos, señalando que el personal de playas tiene sus días de descanso los martes y los miércoles, quedando solo cinco trabajadores disponibles para todas las playas de la ciudad. Esto explicaría la escasa presencia de personal en San Amaro y otras zonas durante esos días, lo que ha provocado que solo se enviara un pequeño grupo para la toma de fotografías, sin realizar una limpieza efectiva.
La Asociación de Vecinos de San Amaro ha aprovechado esta oportunidad para hacer un llamamiento de atención sobre lo que consideran un "maquillaje" de la realidad, donde se presume de un trabajo que no se ha hecho, dejando a los residentes de San Amaro y sus playas en un estado de abandono preocupante. Esta situación contrasta drásticamente con las declaraciones de la Consejería de Fomento, que en repetidas ocasiones ha afirmado que "los trabajos intensivos en las playas se prolongan durante toda la temporada de baño" y que "mantener las playas limpias es más que un deber ecológico, económico y social, es un servicio público fundamental para la Ciudad Autónoma, para garantizar la seguridad y el bienestar de los usuarios".
Sin embargo, para los vecinos de San Amaro, estas palabras suenan vacías, ya que la realidad que enfrentan es muy distinta. La acumulación de basura, la falta de maquinaria para el mantenimiento de la playa y el abandono generalizado de su entorno han llevado a muchos a preguntarse si su playa está condenada a ser de "segunda categoría", en comparación con otras playas de la ciudad que parecen recibir una mayor atención.
La polémica ha generado un debate más amplio sobre la equidad en la prestación de servicios públicos, especialmente en áreas tan visibles y fundamentales como las playas, que no solo son espacios de recreo, sino también puntos clave para el turismo y la economía local. Los vecinos de San Amaro esperan que sus denuncias sirvan para que la Consejería de Fomento tome medidas inmediatas y efectivas, garantizando que todas las playas de la ciudad, sin importar su ubicación, reciban el mismo nivel de atención y mantenimiento, tal como se les prometió.
