Las autoridades judiciales de Tetuán pretenden cortar los pases a nado entre Marruecos y Ceuta. Para ello, han decidido procesar a todos los candidatos a la inmigración clandestina que intenten nadar hacia las playas de Ceuta y a los sean devueltos por las autoridades españolas en el marco de las 'devoluciones en caliente'. Esta medida se justifica por el riesgo que estas personas representan para sus propias vidas y las de otros, al ingresar en una zona de seguridad prohibida, crear caos y aglomeraciones, y alentar a menores a nadar en el mar, ignorando los peligros de esta aventura con consecuencias imprevisibles y que ha acabado con las vidas de decenas de migrantes en el último año.
Han tomado la decisión de procesar a 47 inmigrantes devueltos en frontera por España. Algunos de estos individuos también estaban prófugos de la justicia o fueron sorprendidos con objetos prohibidos por la ley marroquí.
Según fuentes cercanas a la investigación, para Press Tetouan, el viernes por la noche, bajo una espesa niebla que cayó poco después de las oraciones en Marruecos, varios jóvenes intentaron un pase colectivamente hacia las playas de Ceuta. Sin embargo, la vigilancia de las fuerzas de orden público marroquíes lo impidió, aunque en redes sociales circulan vídeos en los que se observa que las fuerzas marroquíes no actúan cuando los migrantes se lanzan al agua.
Medios marroquíes como destacan la estrecha coordinación entre las fuerzas policiales de España y Marruecos, lo que permitió la detención de más de 590 candidatos a la inmigración clandestina, entre ellos varios menores, procedentes de diversas ciudades marroquíes, así como personas de diferentes nacionalidades, incluyendo Argelia, Túnez y Siria.
