La Guardia Civil detiene en Málaga a un «muyahidín virtual» que hacía proselitismo de Daesh en la red

Mediante la creación de numerosas cuentas de redes sociales, administraba directos lives y canales cuyo objetivo principal era la difusión de contenidos yihadistas auto editados de aparatos de propaganda oficial de la organización terrorista

Momento de la detención del presunto yihadista (GUARDIA CIVIL)
photo_camera Momento de la detención del presunto yihadista (GUARDIA CIVIL)

La Guardia Civil ponía ayer a disposición judicial a un hombre arrestado esta semana en Málaga por sus actividades de proselitismo y reclutamiento a favor del terrorismo yihadista. El detenido ha sido enviado a prisión por el juez.

Según informa la Guardia Civil, el hombre desarrollaba una intensa actividad de difusión de mensajes yihadistas y propaganda del Daesh. A través de redes sociales y mensajería instantánea encriptadas, el detenido adoctrinaba en las tesis de la organización terrorista. Mediante la creación de numerosas cuentas de redes sociales, administraba directos lives y canales cuyo objetivo principal era la difusión de contenidos yihadistas auto editados de aparatos de propaganda oficial del Daesh. Sus consignas llegaron a varios miles de seguidores a través de internet.

El detenido contaba con experiencia en la estrategia mediática descentralizada de la organización terrorista Daesh, que ponía de manifiesto en la maquetación de contenidos yihadistas con más de 20 softwares de edición especializada.

La tipología de contenidos terroristas que difundía era variada. Por un lado, propagaba viralmente en la red archivos de reconocidas figuras ideológicas y dogmáticas del Daesh, como Abu Ali al-Anbari, quien desempeñó un rol importante en la estructura militar de la organización tras servir como emir del Departamento de Soldados y nombrado adjunto del líder Abu Bakr al-Baghdadi. Por otro lado, promocionaba contenidos incitadores a la violencia como los atentados suicidas de la organización terrorista en zonas de conflicto o los ataques terroristas cometidos en el Crocus City Hall de Moscú, que dejó más de 140 fallecidos y centenares de heridos.

Durante la investigación ha quedado constatada la división que el detenido hacía en su día a día, por un lado manteniendo un modo de vida aparentemente normal y por otro teniendo una gran actividad terrorista a través de internet. Esta persona se encontraba inmersa en un profundo proceso de radicalización, considerado como un auténtico muyahidín virtual en busca de la «yihad de la palabra».