El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha subrayado la importancia del principio de solidaridad y unidad en la gestión de la acogida y reparto de menores extranjeros no acompañados. Durante su visita a Ceuta, defendió que las perspectivas de las regiones saturadas por la llegada de menores sean consideradas por el resto de las comunidades autónomas. Aseguró que el Gobierno de Pedro Sánchez ha estado haciendo esto desde el principio.
En la Conferencia Sectorial de Infancia que se celebrará esta tarde en Tenerife, se debatirán todas estas cuestiones. En la agenda estará la propuesta de modificar el artículo 35 de la Ley de Extranjería. Con esta modificación, el Gobierno nacional, respaldado por los gobiernos autonómicos de Ceuta y Canarias, pretende obligar a las comunidades autónomas a acoger a menores migrantes procedentes de las autonomías que sufren una mayor presión migratoria.
Grande-Marlaska apeló al principio de solidaridad, recordando que fue definido en el pacto migratorio aprobado durante la presidencia española del Consejo de la Unión Europea por todos los Estados miembros en diciembre. Expresó su preocupación de que Europa nos vea mal si no somos capaces de practicar este principio entre nosotros mismos, entre las 17 comunidades autónomas y las 2 ciudades autónomas.
El ministro insistió en la necesidad de formular una regulación acorde al desafío que enfrentamos, y que ya estamos abordando esa modificación del artículo 35 de la Ley de Extranjería. Posteriormente, debemos dotarnos conjuntamente de los medios necesarios y precisos para que cada comunidad autónoma pueda absorber, dentro del principio de solidaridad.
Valoró el apoyo de los gobiernos autonómicos liderados por el Partido Popular, como el del presidente de Ceuta, Juan Vivas, con quien se reunió esta mañana. A pesar de pertenecer a gobiernos ideológicamente distintos, ambos reconocen que la unidad es prioritaria en estas cuestiones.
Defendió que las visiones de Canarias y Ceuta sean escuchadas por el resto de las comunidades autónomas, tal como ha sido desde el principio por el Gobierno de España. Afirmó que quienes gestionan y trabajan conjuntamente en beneficio de la sociedad lo saben.
Se refirió al líder del PP en España, Alberto Núñez Feijóo, quien informó que los presidentes populares asumirán a “esos 400 menores” que saturan los centros de menores en Canarias y Ceuta. Marlaska estuvo de acuerdo con este plan de contingencia, pero no lo consideró suficiente.
Insistió en que, más que un plan de contingencia, debe haber una regulación acorde al desafío que enfrentamos. Propuso, además de la modificación de la Ley de Extranjería para hacer obligatorio el reparto, trabajar posteriormente en la dotación de los medios necesarios y precisos para que cada comunidad autónoma pueda absorber, dentro del principio de solidaridad, a los menores en los términos necesarios y precisos. Este es el principio de solidaridad.
