Entre las representaciones iconográficas de la Virgen María, no es habitual contemplar el momento de la Dormición o muerte de la Virgen en una cama, a la espera de ascender a los cielos. Esta representación tiene una imagen que han presidido la celebración de la solemnidad litúrgica de la Asunción de la Virgen oficiada hoy, a las 11:00 horas en la Catedral.
La Asunción de la Virgen es uno de los principales dogmas de la Iglesia Católica, como señalaba el vicario Francisco Jesús Fernández Alcedo. E el interés de la imagen radica en ese tránsito entre la vida y la muerte.
La promulgación del Dogma dice que la Virgen María, después del curso durante esta vida, fue asunta al cielo en cuerpo y alma, pero no explica si murió o no en realidad. En la Iglesia, caben las dos opciones: hay quienes aseguran que sí fue madre de Jesús y murió como criatura humana que era, pero también existe la corriente de que si la herencia del pecado original era la muerte y la Virgen nace inmaculada, esto no sucedió. Por eso la Virgen de Ceuta, más que muerta, es una dulce y serena Virgen Dormida, esperando el momento de ser ascendida a los cielos.