La segunda jornada del II Foro Económico del Español ha contado entre sus platos fuertes con la presencia de Juan Bravo, vicesecretario de Economía del PP, ex consejero de Hacienda de la Junta de Andalucía y ex diputado por Ceuta. Bravo ha vuelto a la ciudad, una vez más, demostrando la fuerte vinculación que mantiene con la misma y agradeciendo tanto a los responsables del Español como de la Ciudad Autónoma y la Cámara de Comercio el compromiso con Ceuta, demostrado en la organización de eventos como este.
Un evento en el que la protagonista es Ceuta, como lo ha sido durante su intervención, en la que ha puesto sobre la mesa el buen trabajo que se ha venido desarrollando tanto por la administración como por los empresarios ceutíes para reconvertirse, una vez más, tras el cierre de la frontera al denominado “comercio atípico”. Una reconversión que se iniciaba con la atracción de empresas de juego on line pero que va mucho más allá, como se está demostrando con el proyecto de incubadora de alta tecnología para el sector turístico o el vivero 4.0, que llegarán de la mano de la Fundación Incyde y la Cámara de Comercio en poco más de un año. Y es que, ha explicado Bravo, para “Ceuta no era fácil reinventarse, porque necesitaba algo que valiera mucho pero que no requiriera espacio” y eso es algo que ofrece la industria tecnológica.
Así, la Ciudad debe aprovechar las oportunidades que se abren a nivel europeo, especialmente tras el informe de Mario Draghi que señala el camino que se debe seguir para avanzar frente a dos grandes gigantes como son China y Estados Unidos y que pone el foco en la necesidad de inversión en innovación para un mundo que ya ha cambiado. Así, ha explicado Bravo, a Ceuta se le abren oportunidades en el ámbito de la acogida de nómadas digitales, por ser “una ciudad fantástica, con una fiscalidad competitiva, y con talento”. También se abren oportunidades en el ámbito de la Defensa, no concebida del modo tradicional, sino centrada en aspectos como la inteligencia artificial, los datos y la ciberseguridad, empresas todas que se pueden desarrollar desde Ceuta y, probablemente, de forma más barata que desde otros puntos del continente. Además, el aspecto energético también es vital y Ceuta está trabajando en ello, en primer lugar con la implantación de energías renovables y de otro con el proyecto del cable eléctrico, que ya se está ejecutando y que permitirá a la ciudad no solo la conexión con la península sino mayor capacidad energética. Todas estas oportunidades sitúan a Ceuta, ha explicado, en una posición favorable en un mercado único, sumándole las ventajas de contar “con una administración pequeña y cercana, dotada de flexibilidad para las necesidades del empresariado”
Ese es el camino del futuro, porque hay que poner el dinero en la innovación, en industrias productivas, y Europa va en esa dirección. Para ello, Ceuta cuenta con la industria turística y con la tecnológica, que en apenas cinco años ya es conocida a nivel nacional e internacional, si todo esto se suma, y todo el mundo empuja, esa posición envidiable será una realidad. Una realidad que será “mérito de los ceutíes, que son capaces de reinventarse” y de reinventar una ciudad entera que “ahora está por delante de lo que se está haciendo en otros sitios”. Es por eso que Bravo lo tiene claro: “yo creo que el futuro de Ceuta es impecable”.
