El pago del incremento del IPC se ha convertido en un verdadero quebradero de cabeza para los trabajadores de Trace. Según Javier Lirio, delegado sindical de CCOO en Trace, se estima que los empleados perderán alrededor de 500 euros. Lirio señala que la empresa “se niega a sentarse” a negociar el incremento del 3,1% que les corresponde y que se acordó en diciembre, pero que aún no se ha reflejado en las nóminas de los trabajadores.
Lirio afirma que la negativa de TRACE a negociar es conocida por la Ciudad, que ya ha informado que solo se responsabiliza de una subida del 2% a partir de septiembre, cuando TRACE se desligue por completo del servicio de limpieza viaria de Ceuta.
El delegado sindical de CCOO en Trace subraya que el aumento correspondiente a la plantilla, desde el 1 de enero hasta el 31 de agosto, “debe ser abonado por la empresa o negociado, pero no quiere hacerlo”. La plantilla empieza a asumir que TRACE no pagará los atrasos por la subida del IPC.
Sin embargo, esta no es la única situación tensa dentro de la empresa. CCOO denuncia el “acoso que siguen sufriendo los trabajadores afiliados a CCOO”, especialmente Manuel Fuentes, capataz y delegado sindical de Comisiones, quien “está sufriendo un acoso y una persecución por parte de algunos jefes que es horrible”, según Lirio.
El delegado sindical en el Comité de Empresa de TRACE confía en que el nuevo Gerente de Servilimpce, Luis de la Barrera, “ponga orden” en lo que insiste es una persecución a Comisiones Obreras en una empresa que “lo está permitiendo todo”. Añade que “si esto se retrasa más, no sé qué puede ocurrir, porque el personal está muy quemado”, concluye Javier Lirio.
