¿Es hora de decir adiós a los Fuegos Artificiales?

Último día de Feria con los fuegos artificiales
"Los fuegos artificiales pueden ser espectaculares, pero no valen la pena si causan sufrimiento. Busquemos alternativas que permitan celebrar sin perjudicar a nadie".

Y llegó el último día de feria. Después de una semana de luces, fiesta y alegría, las fiestas patronales llegan a su fin. Con el final llegan los tan esperados fuegos artificiales, ese evento pirotécnico de luces y formas que no dura más de 10 minutos. No es mucho, dirían muchos. Pero sí lo es. Y así lo piensan todas esas madres y padres de niños con capacidades diferentes e hipersensibilidad sensitiva. 

Niños, por ejemplo, con autismo, para quienes esos 10 minutos se hacen eternos. O esos animales que se dañan a sí mismos del susto e incluso, en los peores casos, terminan en algo más feo. Diez minutos que para muchos no son para tanto. 

Y si no son para tanto y sabemos que afectan negativamente a una parte de la sociedad y la naturaleza, ¿por qué no cambiarlos?

¿Tan importantes son esos 10 minutos de lucecitas y ruido que convierten la noche de muchas personas y animales en un auténtico infierno? ¿Que convierten esa noche del perro de tu mejor amiga en un momento malo de tensión y ansiedad? Parece que cuando algo no nos toca personalmente, no existe. Y qué pena.

Por no hablar de los gases que expulsan al medio ambiente y que se suman a la infinidad de maldades que el ser humano está haciendo con la Tierra. 

Tan modernos para tantas cosas y tan antiguos para otras. No tengo la menor duda de que hay opciones para crear luces y figuras en el cielo sin llegar a este punto. Pongamos de nuestra parte.

¿Por qué no probamos con shows de luces láser, drones luminosos, o incluso espectáculos de luces silenciosas? Hay tantas opciones creativas que no causan daño y que podrían ser igual de impresionantes. Así, todos podemos disfrutar de la fiesta sin lastimar a nadie.

Es hora de repensar nuestras tradiciones y adaptarlas para ser más inclusivos y respetuosos con todos los seres vivos y el planeta. Los fuegos artificiales pueden ser espectaculares, pero no valen la pena si causan sufrimiento. Busquemos alternativas que permitan celebrar sin perjudicar a nadie.