El Nàstic pagó caro sus marrullerías pero puede que tenga más que pagar

Los catalanes no sólo se quedaron sin el ascenso. El árbitro del encuentro redactó un acta en la que reflejó amenazas de muerte e insultos. Hubo agresiones antes y después del partido y Antiviolencia tiene que resolver el expediente por los insultos e incidentes en el campo del Nàstic durante el partido con el Ceuta

 

Ya hubo incidentes entre aficiones antes del partido
photo_camera Ya hubo incidentes entre aficiones antes del partido

El ascenso a Segunda División de Málaga se celebró en Ceuta casi tanto como en Málaga y lo que era una frustración en Tarragona se convertía en alegría para los caballas que sentían que el Nàstic les habían arrebatado el sueño de luchar por el ascenso. Unos lo llaman justicia, otros karma, y es que el gol de Antoñito resonó en Ceuta como propio.

Pero más allá de la alegría por el ascenso del conjunto boquerón, el duelo -porque fue una especie de batalla campal- dejó, de nuevo, lamentables escenas antes incluso del inicio del partido -como ya sucedió en los momentos previos al encuentro entre el Nàstic y el Ceuta- con una agresión a un hincha malaguista por un grupo de aficionados del equipo de Tarragona. Pero durante el partido, hubo lanzamiento de objetos al terreno de juego, retención de balones por los recogepelotas, lo que desembocó que el colegiado Eder Mallo detuviera el partido, mandando a los equipos al vestuario. Tras la reanudación, llegó el gol de la victoria de los malagueños y ahí se sucedieron más incidentes que podrían acarrear serios problemas a la entidad del Gimnàstic.

Acta del Nàstic Málaga
Acta del Nàstic Málaga

El acta arbitral incluye un detallado informe en las incidencias de público, llegando incluso a tener que parar el partido en el 113 de la prórroga y estando detenido durante siete minutos. Mallo informa de que en el 33’ se lanzó una moneda de 20 céntimos en el área del portero visitante, en el 72’ tras el gol de Godoy se observa el lanzamiento de un petardo sobre el campo y la encendida de dos bengalas en las gradas y en el 113’ informa de que paró el partido durante siete minutos por lo siguiente: Tras producirse el lanzamiento de varios balones desde la grada en el fondo izquierdo según miramos desde vestuarios (misma ubicación que los incidentes anteriormente mencionados). Tras este hecho, viendo lo perjudicial para el desarrollo normal del partido y los hechos acontecidos previamente, se procede a la retirada de jugadores y equipo arbitral a vestuarios. Estuvo detenido el juego durante 7 minutos, en lo que se comunicaba esta situación con coordinadores de seguridad, entrenadores y delegados, llegando a un consenso para continuar y a controlar los balones ubicados en la zona de cuarto árbitro. No se volvió a producir este tipo de lanzamientos, pudiendo finalizar el partido.

El colegiado vasco también reflejó el comportamiento de dos jugadores del conjunto catalán, en concreto, Nacho y Concha. A los dos los expulsó, aunque al central lo hizo en el 63’ por doble amarilla y a Concha ya en el 120’. De Nacho González señala en el acta que “tras la expulsión del Nº3 D. Ignacio González Ruiz, se dirigió al cuarto árbitro, encarándose hacia él y llegando a golpearle con su dedo índice en la zona derecha de su costado. Tras esto, se mantiene en boca de vestuarios, visible desde el terreno de juego, presenciando el partido y negándose a retirarse pese a las insistencias nuestras y del equipo de seguridad. Continuó increpándonos tanto al equipo arbitral como al equipo rival”.

Con Concha fue más duro y lo acusa de agredir a uno de sus asistentes: «En el minuto 120 el jugador (23) CONCHA SALAS, DAVID fue expulsado por el siguiente motivo: Por salir del área técnica gritando y gesticulando, protestando una de mis decisiones. Dirigiéndose a mi asistente número 1 en los siguientes términos: «Sois unos sinvergüenzas, hijos de puta». Negándose a retirarse a vestuarios. Previamente, le lanza el agua de una botella de 33cl vaciándola sobre su cuerpo».

Pero lo peor estaba por llegar, una vez terminado el partido. Mallo reflejó cómo vivió el cuarteto arbitral su paso por el vestuario a la conclusión del partido. «Una vez nos encontramos en vestuarios, pudiendo acceder a ellos gracias a la ayuda de la fuerza pública, se producen multitud de incidentes en la puerta de nuestro vestuario». Denuncian que les «golpean con agresividad nuestra puerta en hasta 24 ocasiones» y que les increpan con los siguientes gritos: «Vais a morir», «Sinvergüenzas», «Tu hijo va a morir», «Ojalá os matéis», «Hijos de puta», «Que muera vuestra puta familia», «Tu puta madre», «Te voy a perseguir hasta el final, si tienes huevos baja (en 4 ocasiones)». A estos gritos añaden lo siguiente: «Llegamos a temer por nuestra integridad física, al ver cómo abrían la puerta y nos increpaban». Además, informan de que «la seguridad presente nos indica que les es imposible retirar y controlar a esta gente puesto que según nos dicen, «son varios directivos y propietarios del club». Todo esto provocó que tuvieran que salir escoltados del Nou Estadi para garantizar su integridad.

El jefe de seguridad del Nàstic, arrastrando por el césped al periodista Carlos Pardo (Bad Charly)
El jefe de seguridad del Nàstic, arrastrando por el césped al periodista Carlos Pardo (Bad Charly)

A todo esto, hay que añadir la agresión que sufrió el comentarista deportivo del Málaga Bad Charly a manos del jefe de seguridad del Nàstic una vez concluido el partido. Bad Charly fue empujado, lanzado al suelo y arrastrado por el césped. Un hecho que el malagueño ha denunciado en sus redes sociales.

Además, el conjunto catalán puede ser sancionado no sólo por lo sucedido en la final del play off. Antiviolencia tiene que resolver el expediente por los insultos e incidentes en el campo del Nàstic durante el partido con el Ceuta.